Vamos al cine

Esta semana me he visto dos películas: Transamérica de Duncan Tucker (con Felicity, de "Mujeres Desesperadas" y Volver , de Almódovar.

Aunque no coincido del todo con las críticas que leo, sí hay dos cosas que me han gustado de las dos. De la primera, el ver a Felicity haciendo lo que hace. Porque si ves la serie de Mujeres desesperadas, igual te sorprende menos, pero para mi señora y yo, que no la hemos visto nunca, no sabíamos quien era y era fascinante ver a la mujer haciendo de hombre que quiere ser mujer.
La otra cosa que le agradezco a la peli es que ha evitado la crueldad que se ha usado en otros: ataques de cerrados de mollera, de los tejanos que les rapaban la cabeza a los hippies, o de cualquier otro. Ese tipo de violencia me suele parecer simplemente deprimente. Ya sabemos todos lo duro que es el camino de una trans...





La otra, Volver, me gusta no como película en sí (nunca me han resultado creíbles la mayoría de las películas de Almodóvar, ... un día hacemos un post de crítica almodovariana), sino que me ha gustado como buena muestra, en película, de lo que dice Vicenç Navarro en "El subdesarrollo social de España": mujeres cuidando de los mayores y enfermos, curra que te curra, con esa ropa, esas maneras de sentarse, esa muestra de mujer explotada...

Eso sí, entre las varias cosas que no me gustaban de la peli, la que más gracia me hace es la pinta de Penélope Cruz, a la que se quería convertir en una especie de segunda Sofía Loren. Y lo consigue. El problema es que lo que sobra entonces es el resto de la peli... Ella así de glamurosa cuadraría bien en una peli a lo "Dolce Vita" o en una de los 70, con cardados vertiginosos... pero no la veo en un barrio de Vallecas, escapada del pueblo, puteada, casada con un gañan, y con esos pelos y ese maquillaje.

Me da la impresión de que intenta ser un "volver" a los planos que le dieron más "imagen propia" a Almodóvar: el plano de la tabla de cortar, con los pimientos, tan parecido al de los tomates, haciendo el gazpacho de "Mujeres al borde..."
Esas escenas domésticas con el marido que intentan reeditar "¿Que he hecho yo para merecer esto?", sin faltar un detalle.
Las escenas del pueblo, que suenan a otras escenas de pueblo de sus pelis...
Pero lo intenta, lo intenta y no me lo acabo de creer.
La ventaja delante de los Oscarizadores es que no saben si el tono de las actrices es creíble o no...

De antes me gustaba que recogió la movida en película, que le dió a ese grupo trans/bollo/gay/drogas/pueblo una peli donde verse.
Me gustaron algunas idas de olla (Entre tinieblas) o "Realismo Capitalista", como el de "Qué he hecho yo para merecer esto".
Los culebrones (muchas de las suyas) a mí ya me daban más pereza, algunas ni las he visto.
Hoy en día me gustaría que hiciese una de "ultrasalud": de mujeres reoperadas, orgánicas, vegetarianas, de gimnasio, supermujeres madre-profesional-perfecta... Que la hiciese o él o alguien...
La hostia que rollo sobre cine he soltado al final.